Ciudad de México. Alejandro Encinas Rodríguez inició este miércoles su misión como representante de México ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) con un mensaje enfático sobre la defensa de la soberanía de las naciones. Al dirigirse por primera vez al Consejo General de la OEA, en sustitución de Luz Elena Baños Rivas —quien encabezó la representación mexicana desde 2019—, Encinas enfatizó la postura diplomática de México en contra de cualquier intento de injerencia en los asuntos internos de los países miembros.
En una sesión del Consejo Permanente celebrada en la sede de la OEA en Washington, y transmitida en línea, el nuevo representante permanente dejó en claro “la acción de México seguirá estando guiada por los principios constitucionales de nuestra política exterior, donde defenderemos siempre la igualdad soberana de los Estados, la no intervención, la autodeterminación de los pueblos y la solución pacífica de las controversias”.
En esa misma línea, el diplomático subrayó ante sus pares regionales, que le dieron la bienvenida, que su gestión operará bajo los ejes trazados por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, basados en la “responsabilidad compartida, confianza mutua, respeto a la soberanía de los Estados y cooperación sin subordinación”.
Encinas advirtió que, si bien México colaborará con el Grupo Voluntario de Seguimiento a la Carta Democrática Interamericana, vigilará que este foro se mantenga como un espacio de intercambio de buenas prácticas y que de allí “no deriven mecanismos que puedan interpretarse como espacios para la intervención en los asuntos internos de los Estados”.
Hizo un llamado a transformar la dinámica actual de la institución. En un “contexto global desafiante”, señaló que México buscará que la OEA sea más transparente y efectiva, “apostando por un multilateralismo que sea punto de encuentro y no de confrontación”.
El funcionario aseguró que México mantendrá su participación activa en el Sistema Interamericano y cumplirá con sus obligaciones, incluyendo el seguimiento a casos y medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Encinas prometió priorizar la generación de estándares internacionales para poblaciones vulnerables, mencionando específicamente a personas en situación de pobreza, migrantes, pueblos indígenas y la población LGBT.
Sobre la crisis de seguridad en el Caribe, afirmó que se dará prioridad al Grupo de Amigos para Haití. Enfatizó que el apoyo para la gobernabilidad democrática y el desarrollo sostenible de esa nación debe realizarse siempre “con liderazgo haitiano y acompañamiento internacional respetuoso”.
Encinas advirtió que, si bien México colaborará con el Grupo Voluntario de Seguimiento a la Carta Democrática Interamericana, vigilará que este foro se mantenga como un espacio de intercambio de buenas prácticas y que de allí “no deriven mecanismos que puedan interpretarse como espacios para la intervención en los asuntos internos de los Estados”.
Destacó la ejecución de una política exterior feminista bajo el liderazgo de la primera mujer presidenta de México y concluyó citando el principio juarista que regirá su estancia en Washington: “El respeto al derecho ajeno es la paz”.